Cada vez más personas en España están dejando de trabajar en la mesa del comedor para instalarse en una oficina en el jardín, ya sea para teletrabajar a tiempo completo, trabajar como autónomos o simplemente contar con un espacio tranquilo lejos del ajetreo del hogar. Es el entorno de trabajo ideal… ¡hasta que el WiFi empieza a fallar!
Desde fuera, una oficina de jardín puede parecer perfecta, pero dentro, la baja velocidad, las desconexiones y las videollamadas fallidas en Zoom pueden convertir un día productivo en un auténtico caos. Cuanto más lejos esté del router principal, más débil será la señal, sobre todo si hay muros gruesos, árboles u otros dispositivos electrónicos interfiriendo.
Si alguna vez se ha preguntado cómo mejorar la conexión WiFi en su oficina de jardín en España, siga leyendo, porque existen múltiples soluciones para mejorar la cobertura y asegurarse de que su oficina en el jardín esté siempre conectada.
Antes de invertir en nuevos dispositivos, pruebe estos ajustes básicos para ver si mejoran su señal de WiFi:
Si su router está en una esquina, escondido detrás de muebles o rodeado de objetos, la señal tendrá dificultades para atravesar los obstáculos antes de llegar a su oficina de jardín. Intente colocarlo en un espacio más abierto o cerca de una ventana que dé al jardín para mejorar la cobertura.
Si su router tiene varios años, es posible que no tenga la potencia suficiente para enviar una señal fuerte a largas distancias. Los modelos más recientes ofrecen mayor alcance, más velocidad y antenas más potentes, lo que puede marcar una gran diferencia en la conexión WiFi, especialmente si su oficina de jardín está alejada de la casa.
Si vive en una zona con muchas viviendas, las redes WiFi de sus vecinos pueden estar interfiriendo en su conexión. Los routers eligen un canal de transmisión automáticamente, pero a veces cambiarlo manualmente a uno menos saturado desde la configuración del router puede mejorar la velocidad y la estabilidad.
Si nada de esto resuelve el problema, necesitará una solución dedicada para ampliar el WiFi hasta su oficina de jardín.
A continuación, le presentamos las mejores opciones para ampliar la señal WiFi a su oficina de jardín:
Un repetidor WiFi, también conocido como extensor o amplificador, es una opción sencilla de extender la señal hasta su oficina de jardín… al menos en teoría. Estos dispositivos captan la señal de su router principal y la retransmiten para cubrir una mayor área. Son fáciles de configurar, y relativamente económicos, por lo que pueden ser un buen primer paso si su oficina no está muy lejos de la casa. Puede adquirir el repetidor TP-Link RE500X en MediaMarkt o Amazon por unos 40 €.
El problema es que los repetidores no generan una señal más potente, simplemente repiten la que ya existe. Esto significa que, si la señal que reciben es débil, la que transmiten no será mejor. Para que funcionen de manera óptima, la ubicación es clave. Deben colocarse a medio camino entre el router y la oficina de jardín para obtener los mejores resultados.
Si su casa tiene paredes gruesas, hay muchos árboles de por medio o la oficina está a más de 20 metros de distancia, un extensor podría tener dificultades para ofrecer una conexión fiable. Son más adecuados para jardines pequeños, donde la distancia es corta y las tareas son básicas (como navegar y enviar correos electrónicos, pero no streaming intenso ni videollamadas internacionales).
Si busca una conectividad fiable y de alta velocidad sin preocuparse por las transferencias de señal, una red de malla (mesh) es una excelente opción, especialmente para quienes teletrabajan a tiempo completo o gestionan un negocio desde su oficina de jardín.
En lugar de depender de un único router, los sistemas de malla utilizan varios nodos interconectados que trabajan juntos para crear una señal WiFi potente y estable en un área extensa. A diferencia de los repetidores, que pueden causar desconexiones al cambiar de una señal a otra, una red de malla conecta automáticamente sus dispositivos al nodo con mayor potencia, sin interrupciones.
Para oficinas de jardín más alejadas de la casa, colocar un nodo cerca de una ventana orientada hacia la oficina o dentro del propio espacio de trabajo puede mejorar considerablemente la intensidad de la señal. Sin embargo, no es la opción más económica. Estos sistemas están disponibles en tiendas como MediaMarkt o Amazon, con precios que parten de unos 110 € para una configuración de dos nodos. Cuanto más alejada esté su oficina de jardín de la casa, más nodos podría necesitar.
Si busca una conexión a internet rápida, estable y sin interrupciones, nada supera a una conexión directa por cable. Consiste en conectar un cable Ethernet desde su router principal hasta su oficina de jardín. A diferencia de las soluciones inalámbricas, esta configuración no se ve afectada por paredes, distancias o interferencias, por lo que es una opción ideal para quienes dependen de videollamadas, transferencias de archivos grandes o streaming sin cortes para su trabajo.
El principal inconveniente, sin embargo, es que la instalación requiere esfuerzo. Si la oficina está a pocos metros, un cable Ethernet para exteriores puede colocarse a lo largo de una valla o enterrarse. Para instalaciones hechas por cuenta propia, MediaMarkt y Amazon ofrecen cables Ethernet de exterior con precios que van desde 10 € hasta 80 €, según la longitud y calidad.
Para distancias más largas, puede ser necesario recurrir a una instalación profesional para enterrar correctamente los cables y protegerlos de los elementos, lo que incrementará el coste. También conviene tener en cuenta que una conexión por cable reduce la flexibilidad, ya que, una vez instalado, estará limitado a ese punto de conexión.
Si su oficina de jardín está demasiado lejos para un extensor WiFi estándar, pero no quiere lidiar con cables, un transmisor WiFi exterior podría ser la solución ideal. Estos dispositivos están diseñados para cubrir largas distancias y ofrecen mejor rendimiento en espacios abiertos, superando obstáculos como árboles y paredes con mayor eficacia que las soluciones WiFi interiores. Además, algunos modelos son resistentes a la intemperie, lo que los hace perfectos para el clima variable de España.
Para garantizar su efectividad, es fundamental colocarlos en un punto elevado, como una pared o un poste, evitando obstáculos que puedan debilitar la señal. Aunque suelen ser más caros que los extensores estándar, proporcionan una conexión WiFi más potente y estable en amplias áreas exteriores. Por ello, son una gran inversión para propiedades rurales o oficinas de jardín alejadas de la casa principal. Puede encontrar transmisores WiFi exteriores en MediaMarkt o Amazon desde 150 €.
Este método utiliza el cableado eléctrico existente en su hogar para transmitir la señal de Internet desde su router hasta su oficina de jardín. Funciona conectando un adaptador a un enchufe cercano al router y otro a un enchufe en la oficina, creando así una conexión de Internet por cable sin necesidad de instalar nuevos cables.
Su principal ventaja es la facilidad de instalación: no requiere perforaciones ni pasar cables por el jardín. Sin embargo, su rendimiento depende en gran medida de la calidad del cableado eléctrico de la vivienda. En casas más antiguas, la velocidad puede verse reducida, y los adaptadores Powerline no funcionarán si la oficina de jardín está en un cuadro eléctrico separado del de la casa principal. Estos adaptadores están disponibles en varias tiendas de electrónica en España, como MediaMarkt, El Corte Inglés, PcComponentes o Amazon, con precios que oscilan entre 60 € y 150 €.
Para quienes viven en zonas rurales de España donde las opciones de banda ancha tradicionales son limitadas, Starlink puede ser la respuesta. A diferencia de la banda ancha estándar, que depende de cables o redes móviles, Starlink se conecta a satélites de órbita baja para ofrecer Internet de alta velocidad incluso en ubicaciones remotas. Esto lo convierte en una de las mejores opciones para oficinas de jardín en zonas con cobertura WiFi débil o inestable.
Su mayor ventaja es la accesibilidad: siempre que haya una vista despejada del cielo, es posible obtener una conexión rápida y estable, sin importar la distancia entre su oficina de jardín y la casa. Sin embargo, tiene un coste elevado. Starlink requiere equipos especializados y una suscripción mensual, lo que lo convierte en una alternativa costosa. Además, la instalación es algo más compleja, ya que la antena satelital debe montarse en un área abierta para evitar bloqueos de señal.
Los kits de Starlink están disponibles directamente en su página web por 349 € el equipo y 40 €/mes la suscripción. En algunas tiendas especializadas de electrónica, como MediaMarkt, también pueden encontrarse, y ocasionalmente es posible conseguir descuentos en el equipo.
La mejor opción dependerá de su situación particular, pero estos son cinco aspectos clave a tener en cuenta:
Una oficina de jardín solo es realmente útil si cuenta con una conexión a Internet fiable. Sin un buen WiFi, no es más que un cobertizo caro. La clave para elegir la mejor solución es identificar qué aspecto prioriza más (velocidad, fiabilidad, presupuesto o facilidad de instalación) y optar por la opción que le garantice una conexión estable y sin frustraciones.
